Se sienta a los participantes en círculo, con una distancia de seguridad de más de 2 metros. El animador/a dice: “imaginaos que estamos en el mercado de chiní-chinó, que es un mercado de China, en el cual se pueden comprar unas cosas sí y otras no”.
Buscamos tres o cuatro voluntarios, que no sepan cuál es la broma y nos los llevamos a otro sitio. Mientras, contamos a todos los participantes que los voluntarios/as van a decir cosas que quieren comprar en el mercado, entre todas y todos debemos decirles si tienen de ese producto en el mercado de “Chiní-Chino” Si las palabras llevan las letras”i” u “o” no las pueden comprar, y si no llevan, sí las pueden comprar. Los participantes que han salido voluntarios/as deben descubrir por qué pueden o no comprar las cosas.